Los dispositivos médicos inseguros o defectuosos causan millones de dólares en daños, dolor, sufrimiento e incluso la muerte cada año en los Estados Unidos. Cuando te insertan un implante o utilizas un dispositivo médico, pones mucha confianza en ese dispositivo y en los profesionales médicos que lo desarrollaron e implantaron.
Desafortunadamente, las cosas no siempre salen según lo previsto y el dispositivo médico puede causarte mucho dolor, una cirugía de revisión, gasto de tiempo y dinero. En estas circunstancias, necesitarás contratar a un abogado de dispositivos médicos de Florida que pueda ayudarte a responsabilizar a las personas adecuadas por tu pérdida y daño.
Según la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA), un dispositivo médico se define como “un instrumento, aparato, implemento, máquina, artículo similar o relacionado":
Los dispositivos médicos deben pasar por un proceso de homologación con la FDA que es similar a la de los medicamentos con o sin receta. Sin embargo, pueden ser "agilizados" en el proceso si demuestran ser considerablemente similares a otros dispositivos médicos ya existentes. Por desgracia, en algunos casos, el hecho de que un dispositivo ya esté en el mercado no implica que sea seguro. Hay muchas situaciones en las que los dispositivos médicos, que la FDA considera lo suficientemente similares para ser homologados, resultan ser muy peligrosos.
Algunos ejemplos de dispositivos médicos peligrosos conocidos incluyen:
Sin embargo, el hecho de que tu dispositivo médico no esté en esta lista no significa que debas descartarlo como posible causa de tu dolor, malestar u otros problemas médicos a largo plazo.
Algunos dispositivos médicos pueden causar daños y lesiones de por vida. Es posible que tengas que pasar por cirugías de revisión, dolor crónico, atención médica adicional y otras consecuencias negativas. Algunos de los resultados más comunes al usar un dispositivo médico inseguro incluyen:
Todos estos posibles problemas suelen acarrear gastos médicos adicionales, dolor y sufrimiento, gastos de rehabilitación o readaptación profesional, pérdida de sueldo, etc.
En algunos casos, los dispositivos médicos pueden provocar la muerte, lo que causa un sufrimiento indescriptible a las familias y seres queridos. Las consecuencias de la pérdida de un ser querido a largo plazo son incalculables e incluyen cosas como la pérdida de la compañía, la amistad, el amor y otras pérdidas no cuantificables. Para muchas familias esto significa la pérdida del sostén de la familia, y el hecho de tener que pagar grandes e inesperadas facturas médicas y gastos funerarios.
Hay una variedad de personas o entidades que pueden ser responsables de la fabricación y funcionamiento de un dispositivo médico defectuoso o peligroso. La culpa depende de las razones por las que el problema se produjo inicialmente. Por ejemplo, el fabricante puede ser responsable si a sabiendas agilizó el proceso de homologación de un dispositivo inseguro con la FDA. Aquellas personas que te vendieron el dispositivo o te lo recomendaron (como un vendedor, un médico u otro profesional sanitario) podrían ser responsables si sabían que el dispositivo podía causarte algún daño en vez de ayudarte. Incluso el laboratorio que analizó el dispositivo podría ser parcialmente responsable si no examinó a fondo el dispositivo en busca de riesgos antes de que llegara a tus manos.
Debido a que los dispositivos médicos son productos, éstos entran dentro de la amplia gama de responsabilidad de producto en Florida. Sin embargo, estos casos suelen ser mucho más graves o severos en comparación con un caso medio de responsabilidad de productos defectuosos porque implican que un dispositivo sea implantado en el interior de tu cuerpo.
Un abogado de dispositivos médicos puede ayudarte a decidir sobre tus opciones legales si tú o un ser querido padecéis lesiones y daños debido a un dispositivo médico. Llama a nuestro equipo hoy mismo para obtener más información.